Un secador, una plancha de pelo o incluso un rizador se han convertido ya en el indispensable de muchas a la hora de estilizar la melena. No importa si tienes el pelo liso, ondulado o rizado, ya que con un poco de calor y maña se pueden conseguir fabulosos peinados, tanto para ocasiones especiales como para el día a día.
Ya sabíamos que con una plancha de pelo podíamos alisar, crear ondas, rizos o incluso aportar volumen al cabello, pero los secadores no son menos a la hora de conseguir estos looks de belleza. Y es que, a pesar de que siempre se haya pensado en ellos como una herramienta para retirar la humedad de la melena, en realidad podemos conseguir todo tipo de estilismos si disponemos de los cabezales y cepillos necesarios.
Sin embargo, no todos los secadores son iguales, y con el paso de los años han ido mejorando su tecnología. Por eso, con nuestro número de diciembre regalamos un secador de pelo de acabado profesional. ¿Lo mejor? Es de secado rápido, tiene dos velocidades y aporta un acabado más brillante en el pelo, además de ser ligero y silencioso. Puedes hacerte con él y con nuestro última revista a partir del 21 de noviembre en tu quiosco de confianza. ¿Te lo vas a perder?
Aparte de ser un corte de pelo ideal para todo tipo de rostros por la naturalidad que desprende, se trata también de un estilismo fácil de mantener.
Para darle esa forma chic tan característica, debemos, primeramente, eliminar el exceso de agua tras haberlo lavado para aplicar nuestro producto de peluquería favorito mientras lo desenredamos bien, pero es ahora después cuando viene la magia.
Cogemos nuestro secador de confianza y un cepillo redondo, lo colocamos bajo amplios mechones mientras lo vamos girando hacia adentro para que el pelo quede liso, pero con un poco de volumen. Siempre de la raíz hacia las puntas y con el secador de forma perpendicular al peine. Si tienes flequillo, haz el mismo procedimiento levantando un poco el mechón. Y así conseguimos un french bob muy natural.
Exacto, no hay necesidad de plancha para lucir un pelazo extra liso y brillante. Con un secador un un cepillo redondo podemos conseguir el mismo efecto, pero dañando menos el cabello.
Primero, justo después de haber lavado nuestra melena y haber aplicado nuestro producto hidratante capilar favorito, peinamos bien con un peine desenredante y colocamos la raya según nuestra preferencia, bien en el centro o a un lado para conseguir un estilismo asimétrico.
Después, dividimos nuestro cabello en secciones y colocamos el peine redondo bajo estas, siguiendo un movimiento vertical desde la raíz hasta las puntas, con una temperatura media. Repasamos un par de veces hasta que queden las secciones completamente lisas. Aquí el truco está en no girar demasiado en las puntas ni separar demasiado del cuero cabelludo las secciones al peinarlas para que quede toda la melena con un liso uniforme.
Si estás cansada de un pelo sin vida y quieres darle un poco de volumen y gracia, pero que se vea un resultado natural, toma nota para hacer estas sencillas ondas.
Tras haberla hidratado y desenredado, alisamos nuestra melena, sin necesidad de que quede un liso perfecto. Es aquí cuando cogemos amplios mechones y los vamos peinando mientras giramos el cepillo, haciendo hincapié especialmente en las secciones frontales, que son las que van a marcar nuestro rostro.
La clave es realizar el movimiento de forma vertical, no horizontal como en los anteriores estilismos, y con un giro más exagerado hacia afuera, dando vueltas al peine con el mechón sobre este para conseguir unos sutiles tirabuzones.
Nosotras también echamos de menos esos estilismos llenos de volumen que lucían Cindy Crawford o Julia Roberts entre muchas de las celebs del momento, pero nunca es tarde para revivir estos peinados.
Para ello, con el cabello limpio, hidratado y desenredado, vamos a ir peinando por secciones con movimientos envolventes de la mano de un cepillo redondo ancho y el secador en perpendicular a este. Conviene estilizarlo elevando los mechones hacia arriba para conseguir ese volumen típico.
Después, cuando el pelo ya ha cogido un poco de calor, giramos el cepillo para enredar el mechón sobre sí mismo y lo aseguramos con un clip de peluquería. Y, para la sección frontal, estilizamos el pelo hacia atrás de la misma manera. Cuando esté todo fijado, retira los clips y termina de arreglar tu melena con un peine ahuecador o con tus propias manos, evitando que el cabello se aplaste y pierda el volumen que hemos conseguido.
Para las que tenemos el pelo rizado, este truco va a potenciar aún más nuestros tirabuzones naturales. Sólo hace falta un difusor sobre el secador.
Con el cabello limpio e hidratado, desenredamos sin aplastarlo con un peine desenredante y aplicamos nuestra crema fijadora favorita por toda la melena con la técnica del scrunch, evitando la raíz y sin excedernos demasiado en el producto.
Es aquí, con el cabello húmedo todavía, cuando, inclinando nuestra cabeza a los laterales y boca abajo, colocamos los mechones sobre el difusor. Sin necesidad de mover el pelo ni el secador demasiado, conseguimos poco a poco ese volumen natural y con rizos definidos.
2023-11-21T08:33:18Z dg43tfdfdgfd