EVITA ESTOS ERRORES DE ESTILO AL LLEVAR BAGGY JEANS A LA OFICINA

¿Abriste el baúl de los recuerdos y te encontraste con los baggy jeans? Nosotros también, incluso ya habíamos archivado las siluetas ajustadas del 2010 para enfundarnos en hormas más confortables, como aquellas que llevamos en los 90 y principios de los 2000. Como bien sabemos, el fit angosto le dio paso a los diseños oversize, logrando que estos eclipsen escenarios formales como la oficina. No es el fin de los pantalones sastre ni de las faldas lápiz, es solo el comienzo de los vaqueros baggy en el entorno empresarial.

Más allá de ser una prenda completamente cómoda, es un aliado que evoca sofisticación, de allí su aprobación en entornos elegantes. Sin embargo, tenemos claro que podría generar errores estilísticos si no se combina de forma correcta, pues salvarnos de un memorándum es lo único esperado. Es por esto que apoyados en las normas de moda de Primavera-Verano 2024, reuniremos esos tropiezos que impiden desfilar en baggy jeans en el pasillo de la oficina.

Al entender que estos pantalones se encuentran realmente atractivos para la oficina, resolveremos toda falla que paralice su elegancia y sutileza, será un viaje que expandirá nuestra creatividad y curará esos pasos en falso que posiblemente dimos en días pasados.

¿Cuáles son los errores de estilo que debes evitar al llevar baggy jeans a la oficina?

No ir acorde al código de vestuario de la oficina

Olvidarse de los códigos de vestuario es de los errores más comunes que nos encontramos. Cada organización tiene unas reglas básicas en cuestiones estilísticas que es necesario estudiarlas e interiorizarlas. No es lo mismo un entorno creativo donde es permitido una combinación osada a un cargo en un ámbito económico o de bienes raíces que requiere conjuntos más casuales y atemporales. Si el último universo mencionado se asemeja a tu día a día, procura aunar estos jeans de moda a blusas románticas y zapatos elegantes.

Falta de equilibrio en las prendas

Los baggy jeans tienen mucho peso visual por su horma y acabado, generando volumen extra en la parte inferior. Para balancearlo de forma correcta y no caer en un efecto despreocupado, es necesario cuidar las piezas superiores, que sean preferiblemente ajustadas o que se puedan fajar. Los cuellos altos también estilizarán al igual que los blazers ceñidos que llegan a la cadera. Como anexo, usar tanto los vaqueros como los tops anchos acortaría la figura y desataría desenfado.

No cuidar los zapatos en un entorno elegante

Se ha escuchado en muchas ocasiones que los zapatos son los que hacen o deshacen un atuendo, de ellos depende un resultado formal o informal. Así que si estás en un ámbito profesional y esperas protagonizar la junta del mes, elige unos mocasines, flats o stilettos, cambiarán el resultado. Por su lado, los tenis o zuecos será mejor reservarlos para los viernes casuales.

Llevar baggy jeans con rotos o desgastes profundos

En un ambiente de trabajo cada detalle cuenta, así que deja que los vaqueros de rotos y con desgastes hagan de las suyas en la cotidianidad o días de descanso, ya que en momentos de formalidad los tonos básicos y simples llevan la delantera. Un diseño sutil permitirá fusionar una variedad de piezas, además de proclamar distinción.

No cuidar el estado de las prendas

Podrá parecer un tema simple, pero en realidad tiene la autoridad de cambiar la percepción del atuendo. Hablamos del estado de las prendas, esto incluye jeans con manchas de lavado, desgastes por uso excesivo y arrugas. Evitarlo es un paso al éxito, es algo sencillo, pero aseguramos dará un resultado cuidado y de paso sofisticado.

No considerar los accesorios

Para no caer en un estilo poco apropiado para la oficina, presta atención a los accesorios. Aretes sutiles, collares delicados, cinturones y hasta corbatas, completarán ese efecto empresarial que se espera alcanzar. ¿Qué se debería evitar? Collares XL, cadenas con charms modernos que, aunque sabemos están en tendencia, son ideales para contextos más casuales.

No llevar la talla correcta de jeans

Por último, pero no menos importante: la talla de los baggy jeans. Procura que estos se ajusten correctamente a la cintura, no solo estilizará, también darán elegancia. Este es el paso número uno para portar, como las expertas, estos vaqueros en cualquier ocasión de temporada.

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