¿Te has quedado sin huevos o cocinas sin productos de origen animal? No pasa nada: tenemos un truco tan sencillo como eficaz: las semillas de lino o linaza. Al molerlas y mezclarlas con un poco de agua, se convierten en un sustituto sorprendente, perfecto para ligar masas de bizcochos, tortitas o hamburguesas vegetales. ¿Lo mejor? Este huevo de lino (flax egg, en inglés) es saludable, económico, rico en fibra y omega-3. Una alternativa natural que apenas modifica el sabor, pero revoluciona tu forma de cocinar.
Triturar las semillas de lino en la batidora.
Verter las semillas de lino trituradas en un cuenco y añadir el agua.
Mezclar hasta obtener una mezcla homogénea.
Dejar reposar durante 10 minutos, hasta que la mezcla adquiera una textura gelatinosa. El huevo de lino o linaza está listo para usar.