VIAJAR CON MASCOTAS

Para sorpresa de ¿todos?, lo que más titulares está generando acerca de Demi Moore no es ni su impresionante físico (¿puede por favor darme el teléfono del Demonio?), ni los rumores que señalan que podría estar viéndose con Joe Jonas (¿y de él?), sino su chihuahua Pilaf, del que no se separa y que se convirtió en el indudable protagonista improvisado del Festival de Cannes.

Pilaf ha vivido y vive mejor que nosotros: viaja en primera, se hospeda en las suites de los mejores hoteles y recorre el mundo en limusina. Ni siquiera quiero ahondar en qué come para no echarme a llorar la próxima vez que abra mi bolsa de ensalada Florette como si fuera el Beluga de las ensaladas. Pero para poder viajar sin problema alguno con mascota has de ser Demi Moore, porque aunque cada vez son más los hoteles y transportes pet-friendly, en realidad, intentar ir de vacaciones con perrito sigue siendo en ocasiones complicado…

Viajar con mascotas: qué ofrecen realmente los hoteles

Cada vez hay más hoteles pet friendly, pero… ¿Qué excentricidades piden los huéspedes? ¿Qué ocurre cuando quiere una cerveza para su perro? ¿Acaso sólo Demi Moore puede viajar con su perrito sin trabas? Resolvemos las dudas que quizás nadie jamás tuvo y que indudablemente, nadie necesita resolver.

De hecho, en el caso de que tengas más de un perro y quieras viajar con tu pareja perruna (ahora no hablo de Mr Jonas), programas como Pet Friendly, desarrollado por Meliá y Patasbox, que permite que los hoteles Pet Friendly de Meliá permitan acoger hasta dos perros por habitación, sin límite de tamaño o peso, facilitar la vida a los amantes de los animales.

Jorge Mas-Yebra, director en Kimpton Vividora Barcelona, explica que en este cuquisimo hotel se permite también tener hasta dos mascotas por habitación, pero hay una sorpresita a la hora de hablar del tamaño. “Nuestro lema es: ¡Si cabe en el ascensor es bienvenido! Las únicas restricciones que tenemos son para las mascotas venenosas o salvajes que puedan suponer un peligro para el resto de huéspedes, pero en cuanto al tamaño, no hay unas medidas o peso necesarios que tengan que cumplirse. Sí es importante que el cliente informe al hotel sobre las características de su “compañero” de habitación cuando se haga la reserva para poder acomodarlos de la mejor manera”, aclara. De hecho, en Los Ángeles tuvieron un cliente que se alojó con una llama…

Por su parte, Sercotel cuenta con hoteles pet friendly en los que el equipo se esfuerza siempre por poner al huésped las cosas fáciles cuando viaja con el perro y garantizar el bienestar de la mascota durante la estancia. “Nos importan especialmente el confort, la alimentación y la higiene. Nuestro kit incluye una cama certificada por PETA VEGAN con acabados antibacterianos, un bebedero/comedero de acero inoxidable y un snack de bienvenida. Así, las mascotas tienen todo lo necesario para sentirse como en casa”, aseguran.

¿Y a la hora del transporte?

Pero para llegar al destino, a veces es necesario coger un tren, y Ouigo permite llevar también hasta dos mascotas por tan sólo 10 euros cada una. “Es importante respetar al resto de viajeros, y por eso pedimos un buen comportamiento por parte de las mascotas. Algo que se olvida con asiduidad es la documentación de las mascotas y, aparte de su identificación, es muy importante que sean mayores de 12 semanas, no tengan heridas, estén identificadas, vacunadas, etc.”, explica.

Datos procedentes del Instituto Nacional de Estadística indican que en 2024, el 43% de los hogares españoles conviven con mascotas, siendo el 36% de ellas perros o gatos, pero precisamente una anécdota que comparte con nosotros el equipo de Ouigo involucra a una mascota que ni ladra, ni maúlla… “Hace poco, fueron a la puerta de embarque una madre y una hija con un hámster. Al ser un roedor, no puede ir a bordo. Se le hizo saber a la madre en el embarque, y ambas se fueron tranquilamente. A los pocos minutos, volvieron a la puerta de embarque, pero sin hámster, por lo que la tripulación le pregunta que para qué lleva el transportín… La hija, ya nerviosa, habló. “Mamá, di la verdad: El hámster está metido en la maleta y se va a asfixiar”. Por cierto, si ni ladra, ni maúlla… ¿Qué demonios hace un hámster?

Incluso cuando se cumple la normativa, hay quienes no quieren viajar con perros alrededor o no quieren hospedarse en lugares en los que el chihuahua de Demi Moore puede estar comiendo caviar a su lado. En esos casos, ¿cómo actúan los hoteles? Por descontado, todos han respondido que comprenden perfectamente las apetencias de cada huésped, pero yo he de confesar que habría metido a esos huéspedes de mentalidad Cruella de Vil en la maleta, asegurándome de que el hámster fuera el encargado de echar el cierre de la misma.

“Es importante entender la queja y comprender sus motivos. Aunque informamos siempre de la política del hotel respecto a las mascotas en el momento de la reserva, no está de más recordarla a su llegada”, explica Mas-Yebra. “Disponemos también de unas señales especiales para los pomos de las puertas para informar si hay una mascota en su interior. Si en alguna ocasión algún animal se ha quedado solo y hemos detectado llantos o ladridos, hemos llamado a los huéspedes para solicitar su permiso para acompañar al animal y pasearlo por el hotel. ¡A nuestro equipo le alegra el día tener un compañero peludo!”, añade. Especialmente estresante es cuando la situación ocurre en un tren, llevas a tu perro contigo y el viajero de al lado pone la misma cara que pondría Mercedes Milá si se quedara atrapada en un club de fumadores. “Entendemos que no todos nuestros viajeros son pet friendly y por ello, cuando se da algún caso similar, siempre intentamos favorecer la comodidad de viaje de todos los viajeros, por ejemplo facilitando un cambio de asiento y/o coche cuando hay disponibilidad”, aclara el equipo de Ouigo.

Las excentricidades

Disculpad que vuelve a detenerme en el perro de Moore, pero me he topado con un titular de ‘Vulture’ que me ha puesto los pelos de punta: “El perro de Demi Moore no está de acuerdo con los críticos de teatro de Londres”. Quizás mañana reciba un email diciendo que Pilaf va a escribir a partir de ahora mis textos… En su perfil de Instagram, que tiene más de 20.000 seguidores, no faltan fotos con Bella Hadid y Dakota Johnson, y la propia Demi Moore ha asegurado que Pilaf es la estrella. “El accesorio soy yo”, ha dicho.

Pero al parecer, no es la actriz la única que tiene alguna excentricidad con sus mascotas… “Nos suelen preguntar por cervezas para perros, ¡nos hace mucha gracia! Hay humanos que han destacado la deliciosa pinta de algunos de los productos que incluimos en nuestras cajas de suscripción... ¡Y no descartamos que se hayan animado a probarlos!”, dice Marcos Álvarez, cofundador de Patasbox.

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Jorge-Mas Yebra explica que unos clientes de Polonia querían organizar el quinto cumpleaños de su perro, y solicitaron una decoración temática, juguetes de regalo e incluso un fotógrafo. “En Kimpton, contamos con menús adaptados para mascotas, así que no nos costó preparar un menú especial para la ocasión. Fue un desafío logístico, pero nuestro equipo de eventos se involucró tanto o más que si el cumpleaños tuviera que prepararse para uno de nuestros huéspedes (humanos). La celebración fue un éxito”, dice.

No me odiéis por terminar el texto así, pero creo que la temática lo permite… ¡Guau!

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